El culto a la apariencia física promovido por la plataforma y la presión social, aseguran los expertos, serían dañinos para la privacidad y el bienestar de los menores.
Los planes de Facebook para construir una nueva versión de que permita a los niños menores de 13 años usar la red social de forma segura, se han estrellado con la desaprobación de padres de familia, asociaciones educativas, tecnológicas e infantiles y organizaciones de derechos digitales, encabezados por la Campaña por una Infancia sin Comerciales (CCFC, por sus siglas en inglés). Esta última asociación ha enviado una carta al director ejecutivo de Facebook, Mark Zuckerberg, para disuadirlo de seguir adelante con el proyecto. La misiva de la CCFC llega en un momento en que el gigante tecnológico es criticado por amplificar la información errónea a nivel mundial en sus plataformas, al tiempo que expone a los niños a material inapropiado.
“Estamos de acuerdo en que la versión actual de Instagram no es segura para niños menores de 13 años y que algo debe hacerse para proteger a los millones de niños que han mentido sobre su edad para crear cuentas, especialmente porque su presencia en la plataforma podría ser una violación de la Ley de protección de la privacidad en línea y de leyes de privacidad de otras naciones. Sin embargo, lanzar una versión de Instagram para niños menores de 13 años no es el remedio adecuado y pondría en gran riesgo a los usuarios jóvenes”, señalan los autores de la carta enviada a las autoridades de Facebook.
La CCFC, una organización sin ánimo de lucro que busca terminar con el mercadeo dirigido a niños y se encarga de divulgar sus efectos negativos, firma la carta junto con 35 organizaciones más, entre ellas los creadores del documental The Social Dilemma, y grupos organizados de diversos países, como Ghana, Canadá, Australia y Sudáfrica.
La organización también ha acusado a Instagram de “explotar el miedo de los jóvenes a perderse algo” (mejor conocido en inglés como Fear Of Missing Out), puesto que los motiva a revisar constantemente sus dispositivos en busca de aprobación. El enfoque continuo de la plataforma en la apariencia y la autopresentación sería un desafío para la privacidad y el bienestar de los adolescentes. Hasta ahora, Facebook no se ha pronunciado al respecto.
Se trata de un proyecto al menos discutible, pero que viniendo de Facebook, se convierte, además en algo poco fiable. La empresa sigue teniendo graves problemas de seguridad y resguardo de la información privada de usuarios. Por otro lado, la filtración de información inapropiada, en una red social usada sólo por niños, tendría efectos nocivos incalculables.
Por Observador Urbano 16/04/21
Fuente: www.elpais.com – www.hipertextual.com
Imágenes destacada y en nota: pexels.com